30 mayo 2008

Los Lakers, a las Finales.

Los Angeles Lakers se proclamaron campeones de la conferencia oeste y se clasificaron para las finales de la NBA tras derrotar a San Antonio Spurs por 4-1 en esta serie. Pero ciertas decisiones arbitrales más que dudosas pueden haber influido en este desenlace. Tras el cuarto partido, la NBA reconocía el error arbitral al no haber señalado falta de Fisher sobre Barry cuando éste lanzaba un último triple sobre la bocina que no entró. Los tres tiros libres podrían haber significado el 2-2.

Pero lo cierto es que Los Lakers sólo han perdido 3 partidos desde que comenzaron los playoffs y eso también se ha notado en el aspecto físico. El estar más descansados ha sido de gran ayuda en varios momentos para remontar resultados adversos contra los Spurs, sobretodo en el primer partido. Recordemos que los de Popovich venían de una dura serie a 7 partidos contra New Orleans. Los angelinos llegan a unas finales 4 años después de que cayeran vapuleados por los Pistons en 2004 (4-1), lo que supuso que Phil Jackson dejara el equipo y el más que sonado "divorcio" Bryant-O'neal.

Kobe Bryant ha sido una vez más el jugador decisivo capaz de ganar partidos prácticamente solo y en esta final de conferencia ha promediado 29.2 puntos, 5.6 rebotes, 3.8 asistencias y 1.6 robos, con un 53% en tiros de campo. De sus 39 puntos en el partido decisivo, 17 llegaron en el último cuarto; en el primer encuentro acababa con 27 tras haber anotado sólo 2 en la primera mitad. El caso es que se había hablado mucho sobre cómo sería su actuación ante un duro defensor como Bruce Bowen, pero un dato curioso es que Bryant sólo ha lanzado 11 tiros libres en esta serie mientras que tuvo que hacerlo 96 veces en la semifinal ante Utah. Con un defensor o con otro, con faltas o sin faltas, ha vuelto a demostrar su motivación y sus aspiraciones que automáticamente son proporcionales a las de su equipo.

23 mayo 2008

Sólo Puede Quedar Uno

Sea quien sea el campeón de la NBA este año, podrá decir que lo ha conseguido la temporada en la que cuatro de los equipos más míticos de la liga han llegado a las finales. Entre Boston Celtics, Detroit Pistons, Los Angeles Lakers y San Antonio Spurs acumulan 37 campeonatos de la NBA y 57 títulos de conferencia. Además, 8 de los 10 últimos anillos se han repartido entre Spurs (1999, 2003, 2005, 2007), Lakers (2000, 2001, 2002) y Pistons (2004). Para recordar el último trofeo de los Celtics tenemos que remontarnos al año 1986 cuando derrotaron en la final a los Rockets de Olajuwon.

En el este, los Boston Celtics, que parten como favoritos desde que ficharon a Allen y Garnett, son el único equipo que ha tenido que ir a 7 partidos en las dos eliminatorias anteriores para llegar a la final de conferencia. Además, se enfrentan a los siempre aspirantes Pistons cuyos jugadores, que llevan jugando juntos mucho tiempo, ya han golpeado en Boston recuperando el factor cancha.

En el oeste, los Spurs, otro equipo siempre candidato al anillo cuenta también con el mismo bloque de jugadores que fueron campeones en 2005 y 2007. Tras eliminar a Phoenix sin muchos apuros, se las vieron y se las desearon para hacer lo propio con el equipo revelación de la temporada, New Orleans Hornets, a quienes ganaron en el partido decisivo a domicilio apelando a su espíritu de lucha y a su experiencia. Su rival, los Lakers, ha recuperado la máxima ambición desde que hacia el mes de febrero llegara Pau Gasol, pieza clave junto con Odom y un extramotivado Kobe Bryant que, tras el propio fichaje de Gasol y su nombramiento como MVP, está jugando en su mejor nivel.

Por el mundo baloncestístico planean apuestas de todo tipo y para todos los gustos, incluso circula una “porra” en internet en la que la gente apostaba sobre cuándo Bruce Bowen intentaría lesionar a Bryant. Este año las finales están más fuertes que nunca, cada jugada y cada canasta serán decisivas.

10 mayo 2008

Manual para ganar los Lakers:

(hasta ahora el único equipo invicto en los playoffs)

1. Intensidad desde el primer al último minuto. Defiende, presiona, lucha todos los balones, en el suelo, en el aire, en las manos del rival; hasta provocar 18 pérdidas de balón.
2. Anota en la pintura... 27 puntos y 20 rebotes de Carlos Boozer, que fue el auténtico amo de la zona y que además estuvo muy acertado en lanzamientos más abiertos.
3. …y en el perímetro. Okur estuvo enchufado con 22 puntos incluidos 4 triples, ante las defensas de Gasol y Odom alternativamente. 8 de 14 en tiros de campo para él.
4. Ten a tu base estrella en su nivel habitual… 18 puntos y 12 asistencias para Williams.
5. …y anula algunos de los jugadores importantes del rival. Pocas veces hemos visto a Gasol más desesperado, sobretodo en la primera mitad, reclamando faltas, perdiendo algunos balones seguidos (hasta un total de 5). Cerrados los caminos del aro y del rebote, se quedó en unos discretos 12 puntos y 6 capturas.
6. Intenta defender a su jugador franquicia, aunque sea el MVP de la temporada, a pesar de que sólo logres frenarle los dos primeros cuartos. Si al final llega a 34 puntos, habrás evitado que fuera a 50 o más.
7. Cuenta con un pabellón a reventar y con una afición impresionante.

Todo esto para mantener la emoción hasta el final del partido ganar por sólo 5 puntos (99-104). Seguro que Sloan sabe que va a ser realmente difícil.

07 mayo 2008

DUDAS

La victoria de Boston ante Cleveland por 76-72 me produce un inevitable impulso de escribir sobre ella, habiendo reflexionado y obtenido una serie de impresiones antes.

La primera es que 76 puntos es la anotación más baja de la temporada para los Celtics que han promediado esta campaña 100,54 puntos por partido en casa (casi 25 más). Cleveland sólo se ha quedado esta temporada por debajo de 72 puntos en el partido que precisamente perdió ante Boston 80-70, aquel día LeBron James no jugó por un esguince en el dedo índice de su mano izquierda.

¿A qué se debe tan baja anotación? En parte a la buena defensa, en parte a la mala actuación de varias de las estrellas que había sobre el parquet, estando ambos aspectos parcialemte relacionados. LeBron James se quedó en 12 puntos, 9 rebotes, 9 asistencias… y 10 pérdidas de balón (casi un cuádruple doble), anotando 2 de 18 tiros de campo incluido un 0 de 6 en triples. Sólo una vez en toda su carrera había anotado menos canastas, fue el 29 de diciembre de 2004 donde falló los cinco tiros que lanzó en 17 minutos, luego argumentó que se había fracturado el pómulo. Anoche, además falló 4 tiros en el último minuto. Hasta los más grandes son humanos. En el otro bando fueron Pierce y Allen los que no estuvieron en sus números habituales. Pierce se quedó con 4 puntos (2 de 14) y 6 pérdidas de balón. Allen se quedó en 0 puntos (0 de 4), su primera participación sin anotación desde 1997 o lo que es lo mismo desde hace 852 partidos, tiene que dar rabia romper una racha así.

La verdadera pelea estuvo en la pintura. Ilgauskas se quedó en 22 puntos, 12 rebotes y 2 tapones, uno de ellos sobre Garnett impresionante. El propio Kevin Garnett estuvo en 28 puntos y 8 rebotes. “Por eso tenemos tres superestrellas en el equipo” decía el pívot de los Celtics Kendrick Perkins al acabar el partido.

La gran diferencia estuvo en que Cleveland acabó con un paupérrimo 30,7% en tiros de campo y Boston con un aceptable 42,6%.

Resumiendo, ayer pareció que los Celtics habían aprendido del “susto” y del esfuerzo extra que les ha supuesto eliminar a Atlanta. Demostraron que también saben ser un equipo muy rocoso en defensa, al igual que en el último partido ante los Hawks... pero a poco que hubiera acertado LeBron se les hubiera escapado la victoria seguro. Sí, es cierto que como he mencionado otros dos que siempre aparecen en los Celtics tampoco estuvieron nada bien en el partido, pero, no sé, a estas alturas de temporada no veo a los que todos pensábamos máximos favoritos tan sólidos como los Lakers (sin ser partidista) o incluso los Hornets. De momento no se les puede decir nada porque ahí están 1-0 en semifinales de conferencia, pero parece que la decepción pueda llegar tarde o temprano y que haya mucha gente esperando para decir eso de "Where Upset Happens" (prensa, aficionados de la NBA…). Si los jugadores son conscientes de eso, y probablemente tras la primera ronda lo sean, creo que se puede convertir en un hándicap en determinados momentos de nerviosismo, aunque hablemos de superestrellas de este nivel. En eso consiste la presión.

04 mayo 2008

El Mundo al Revés

Resulta curioso que la eliminatoria que todos pensábamos que menos duraría sea la única todavía por dilucidar de la primera ronda de los playoffs 2008. Me refiero por supuesto a la que enfrenta a los Boston Celtics contra los Atlanta Hawks. Los primeros han sido desde prácticamente el inicio de la temporada máximos favoritos a llevarse el título, o como mínimo a ser claros campeones de su conferencia y a plantarse en la final. Durante la temporada regular fueron el equipo que más victorias cosecharon con un total de 66 por 16 derrotas. Por otro lado, los Hawks fueron el último equipo del este en colarse en la postemporada y lo consiguieron con más derrotas que victorias, en total 37 partidos ganados y 45 perdidos; una cifra con la que ningún equipo jamás podría soñar en la conferencia oeste para entrar en playoffs, donde el corte lo marcaron los Denver Nuggets con 50 victorias, 13 más.

Con todos estos datos no es necesario mencionar el mérito que tienen los del estado de Georgia al haber forzado el séptimo partido ante los todopoderosos Celtics, incluyendo una extraordinaria victoria por 100-103 en el último encuentro, donde ninguno de sus hombres alcanzó los 20 puntos. O los Celtics se espabilan de cara al último partido, o si el colectivo de Atlanta juega a este nivel y además Joe Johnson o Josh Smith tienen uno de esos días completitos puede saltar la gran sorpresa de verdad.

A la hora de publicar este post está comenzando dicho encuentro decisivo entre ambos, pase lo que pase lo de Atlanta será meritorio, para Boston será un obstáculo superado que analizar de cara a los próximos partidos, o un fracaso en mayúsculas.

01 mayo 2008

Butler did it ("El mayordomo lo hizo")

Caron Butler se erigió como la estrella de los Washington Wizards ante los Cavaliers con 32 puntos, 9 rebotes, 5 asistencias y 2 robos de balón, para dar la victoria a su equipo y poner la eliminatoria 3-2 (todavía en contra). Ante la ausencia de Arenas, por unas molestias en un nervio de su rodilla izquierda, y el mal partido en ataque de Antawn Jamison (8 puntos 3/10), Butler se echó el equipo a la espalda y tras su gran actuación anotó la bandeja que ponía el resultado final (87-88) a falta de 3.9 segundos ante la defensa de Lebron James.

El partido fue muy físico; los Wizards plantearon desde el principio una dura defensa contra Lebron, a veces excediendo los límites de la deportividad, prueba de ello fue el “revés” que Songaila le propinó a James tras agarrarle para que no pudiese saltar en una entrada a canasta. Una acción que rozó la agresión y que se saldó con una falta técnica para el de los Wizards. James estuvo en sus números (34P, 10R, 7A) con lo que es evidente que la clave para los Cavaliers es la aportación de los demás y ayer sólo Ilgauskas estuvo a la altura. Además se dejaron remontar 6 puntos cuando ganaban 87-82 a falta de 1:05.

Un apunte. Hace unos meses todos nos tirábamos las manos a la cabeza por el “regalo” de Memphis a Lakers traspasando a Gasol a cambio de Kwame Brown, Javaris Crittenton, etc. Pocos nos acordamos de que Butler llegó a los Lakers en la temporada 2004-2005 desde Miami junto con Odom y Brian Grant a cambio de O’neal. Aquella temporada, su tercera en la NBA, Butler promedió 15,5 puntos y 5’8 rebotes pero el equipo no se metió en playoffs y fue traspasado a Washington (contrato de 5 años a razón de 46 millones de dólares) junto con Chucky Atkins. A cambio llegaron a Los Angeles Laron Profit, actualmente jugando en Argentina, y el propio Kwame Brown. Vaya traspaso, cosas de la vida.